Pasar un fin de semana rodeadas de personas que cada día trabajan por una educación en la que el contacto con la naturaleza sea el ingrediente primordal, es de las cosas más motivadoras que hemos podido experimentar recientemente.

Esto ocurrió durante el pasado fin de semana en Ozaeta, un bonito pueblo de Álava, donde el proyecto Plisti-Plasta organizó la I Jornada de Espacios de Juego y Educación en la Naturaleza.

Durante las primeras horas pudimos escuchar y aprender de distintos proyectos educativos pioneros, donde el día a día de l@s pequeñ@s transcurre en su totalidad o en su mayor parte en el medio natural. Además tuvimos la ocasión para poder explicar porqué un equipamiento adecuado y de calidad para estar al aire libre, contituye un elemento clave para que niños y niñas puedan desarrollar cómodamente y sin interrupciones su juego, en prácticamente cualquier situación meteorológica.

Ha sido una maravilla poder ver cómo cuando hay motivación y convicción, las familias se organizan para sacar adelante este tipo de proyectos, incluso ante el panorama socioeducativo actual, que lo único que hace es poner trabas a cualquier modelo pedagógico que se aleje de lo institucional.

Por ello, gran parte de las jornadas se volcaron en la reflexión y el debate, pero también en la acción. Acciones encaminadas a dar visibilidad a estos proyectos con el fin de lograr que se normalicen y constituyan una opción educativa más para las familias que así lo deseen. Así de ese grupo de reflexión salió la siguiente declaración que por supuesto apoyamos:

Reunidos y reunidas en Ozaeta (Álava), el pasado 14 de marzo de 2015, espacios, profesionales, familias y otras personas y entidades interesadas en el juego y educación en la naturaleza como movimiento pedagógico, declaramos que los espacios de educación en la naturaleza constituyen una corriente educativa de probada solvencia fuera de Estado Español y cuentan en la actualidad con un crecimiento exponencial en el país. Los espacios y proyectos que utilizan la naturaleza como lugar de referencia pueden ofrecer una educación sólida, sostenible y responsable para la infancia. Dada la actual situación de crisis económica, política y educativa, creemos que este tipo de proyectos son una alternativa real para construir una sociedad más consciente, respetuosa y solidaria; más necesaria que nunca.

Como no pudo ser de otra manera, las jornadas concluyeron jugando en la naturaleza en el taller de «Land Art», que tuvo lugar en un bonito bosque de robles donde los ñiños y niñas de Plisti-Plasta desarrollan su actividad diariamente. Cabe decir que lo pasamos genial, grandes y peques.

Muchas gracias Andrea, Pedro y Hegoi por vuestra acogida, Leire de Zingira, Jose de Silvas y Fentos y también Katia del Grupo de Juego en la Naturaleza Saltamontes por la dinámica de la tarde tan fructuosa; y todas las personas con las que compartimos espacio, reflexión, juego y sobre todo mucha ilusión por una infancia y una sociedad (re)conectada con la naturaleza.