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Breve guía para escoger prismáticos infantiles (de 4 a 12 años)

Escribes “prismáticos infantiles” en Google, y en menos de 3 minutos quieres huir al pasado, cuando todo era más sencillo ¡incluso comprar algo!

Te propongo a que en pocos minutos puedas saber qué prismáticos necesitas para tu peque (o no tan peque).

Así que… ¡Vamos allá!

Si quieres ir directamente al grano, haz clic aquí.

Creo que muchas personas nos hemos quedado con una imagen algo anticuada de los exploradores. Por eso los años 80 están de vuelta. Para hacernos sentir aún más jóvenes de lo que ya nos sentimos.

muñeco de playmobil explorador con prismáticos

Muchas somos de la generación anterior a Dora la Exploradora. En cualquier caso, tenemos claro que una exploradora debe tener unos prismáticos a mano.

Los prismáticos son un pequeño artilugio que emplean prismas y lentes para ampliar una imagen distante. Vamos, ¡tecnología punta de verdad! De la que no necesita actualizaciones porque no falla.

Utilizarlos es gratificante. El tiempo parece detenerse cuando te pones a mirar a través de unos. Producen ese efecto curioso, logrando que puedas concentrarte en lo que estás viendo, incluso si te encuentras en un concierto de rock. La música pasa a un segundo plano y TODA tu atención van a parar a las manos del batería, a quién ahora puedes ver y ¡vaya si flipa ver tocar la batería!

Cuando los peques los usan parece que adquieren poderes mágicos para poder ver todo lo que puedan imaginar: a través de paredes, al otro lado del mar, de noche, etc. Es increíble lo mágico que puede llegar a ser todo cuando se es pequeño.

Ahora, una advertencia: casi todos los adultos piensan que mirar a través de unos prismáticos es tan simple como hacerlo, como lo que tú, que me lees, estás pensando… los agarras, miras y ya ¿no? Pues no es así. ¿Es sencillo? Sí. ¿Es fácil? Bueno… los más peques pueden encontrarlo un poco más difícil. ¿No te ha pasado a ti que al mirar por los prismáticos lo ves todo negro, o la imagen aparece desdoblada? Por ese motivo, a los peques (hasta los 8 años por lo menos) hay que ponérselo fácil.

Beneficios de usar prismáticos

Al usarlos se deja de ver por los lados (visión lateral) fomentando la capacidad de observación y la concentración. Tan sencillo como eso. Después, es conveniente ir poco a poco. Tenerlos disponibles y acordarse de llevarlos en la mochila. Y aquí te doy una pista… prismáticos para las salidas al parque, campo… salidas mínimamente organizadas (agua, mochila, prismáticos, una guía sencillita…), y un monóculo para llevarlo siempre encima. Luego te hablo de los monóculos.

Además, otro punto muy interesante cuando los usamos en la Naturaleza es poder integrar los sentidos, con estímulos coherentes entre sí. En este caso coordinamos el oído y la vista: oyen un canto de ave, lo ubican, se orientan y tratan de buscar con la vista su procedencia.

Características de los prismáticos infantiles

Me vas a permitir saltarme la parte más técnica de todo-aquello-que-debes-saber-para-comprar-unos-prismáticos, ya que vamos a hablar de prismáticos para niños y niñas con edades entre los 4 y los 12 años.

Cosas que debes tener claro:
– Uso
– Resistencia
– Aumentos
– Apertura
– Peso

El peso lo podemos relacionar con la edad y el uso. Una niña de 5 años no podrá manejar bien, ni durante mucho rato ningún prismático de más de 500 g de peso. Tampoco es lo mismo si se usan para observar el cielo nocturno. Eso requerirá unos prismáticos con suficiente apertura (al menos 50mm) para poder ver algo. Esto influye en lo anterior: en el peso. Unos prismáticos ligeros son lo más recomendado, pues los pueden llevar durante un paseo por el campo y apenas notar que los tienen colgados del cuello.

Los peques necesitan poder mirar y ver algo. Sin complicaciones.  

Siguiendo con el uso que se les va a dar, debemos buscar algo que cubra las necesidades reales. Nuestra opinión es que deben tener entre 4 y 8 aumentos, y la apertura ser entre 30 y 50mm. De esa forma nos aseguramos un mínimo de prestaciones para todo lo que se supone que necesita un peque a esa edad, y que se está iniciando.

Ten claro que, a la hora de elegir prismáticos infantiles, más no significa que sea mejor.

Unos prismáticos de 4 aumentos (4x) harán que algo situado a 40 metros pueda verse como si estuviera a 10 metros de distancia. Por eso los 4x son muy recomendables para edades de 4 a 8 años, porque tienen un campo de visión amplio, con una imagen estable. Se trata de que puedan descubrir el mundo que les rodea. Plug ´n Play!

A mayor número de aumentos más sensible será la imagen a cualquier vibración del pulso. Cuanto mayor el campo de visión, mayor el tamaño de los prismáticos, y mayor el peso y más difíciles de manejar.

Por sencillos que sean unos prismáticos, se fomentan habilidades de discriminación visual y de observación.

No pienses que cuanto más cuesten serán mejores. Ten claro el uso que se les puede dar, y eso te ayudará a elegir mejor.

Tienen que ser suficientemente resistentes, pero no los hay que sean irrompibles. No obstante, no hay que olvidarse de cuidarlos (limpiarlos, guardarlos en la mochila, evitar usarlos con lluvia (por la condensación en la lente que impedirá que se pueda ver).

En resumen: busca unos prismáticos adecuados en función de la edad y el uso que les queráis dar. Aunque lo cierto es que para este rango de edad es más sencillo elegir. Si bien siempre hay opciones que se disparan de precio, todo depende del uso que le quieras dar. Ten en cuenta que si los quieres para observar aves, pues depende si lo quieres hacer en plan pro, o sencillamente es para enriquecer las salidas por el campo con los peques. Esto último es lo que te proponemos, porque lo otro es harina de otro costal.

Monóculos VS Prismáticos (Pirates VS Explorers)

Cuál es mejor o más conveniente… ¡Fácil! Los dos. Se complementan perfectamente. Es más, el monóculo es más sencillo de usar y más cómodo. También es un buen primer paso para empezar. Además, te sentirás como un pirata viendo la bandera del navío contrario. Lo que más nos gusta es que son pequeños y ligeros (54g Spiegelburg y 84g TerraKids), resistentes, recubiertos de goma, y tienen bastantes aumentos (8x o 10x). Son una opción excelente para llevar a todas partes. Eso sí, hay que tener en cuenta que para el monóculo es necesario saber hacer el guiño.

¿Qué prismáticos puedo comprar a mi peque?

Los prismáticos que están a la venta en la tienda tienen aquello que nos gusta: cumplen con las necesidades para cada edad, tienen una relación calidad-precio, y siguen como nuevos después de varios años.

Para peques muy peques: tienen que ser seguros (fíjate que tenga broche de seguridad), ligeros, resistentes y con algún color atractivo.

Para edades entre 5 y 8 años tenemos varios, pero todos son de 4 aumentos y 30mm de apertura. Es decir, ya depende de que te guste un color u otro, que incluya funda para llevarlos siempre a mano (siempre a mano es el mejor sitio), o el tipo de broche.

Todos estos prismáticos están recubiertos de goma para resistir golpes, también para que el agarre sea cómodo. Todos tienen una óptica adecuada. Además, son ligeros (menos de 300 g).

Entre los 8 y 12 años te proponemos el siguiente modelo. Ya más grande y pesado (700g), pero a cambio tiene 8 aumentos y 50mm de apertura. Se pueden observar animales y aves con suficiente detalle sin necesidad de molestarles. Incluso se pueden emplear para hacer observaciones de la luna y el cielo nocturno. Son unos prismáticos de iniciación, pero con una buena calidad precio.

Los monóculos son aptos para cualquier edad, y por qué no decirlo, son nuestro «ojito derecho». Lo puedes llevar en el bolsillo a todas partes. El de Nature Zoom es 8×20, y el de Terra Kids es 10×25. Con ellos podrás ver el número del autobús antes que nadie ¡Pero seguro que los peques les encuentran un mejor uso!

No es la flecha, es el indio.

No importa tanto el material que tengas como lo que hagas con él. Observar el mundo a través de unos prismáticos es enriquecedor. Te ayuda a que descubran pequeños detalles. Me gusta la analogía siguiente: es como escuchar la música por un canal en lugar del estéreo: dejas de oír la guitarra y la voz para escuchar el bajo y la batería ¡wow! ¡¿Cómo no me daba cuenta antes?! Las guías de campo son un complemento perfecto para todas las salidas: al parque, al campo, al mar, o a la montaña. También las guías de arquitectura, para esos edificios chulos con fachadas llenas de detalles y que están tan altas… pero ese tema no es mi especialidad.

A continuación te dejo una selección, para varias edades, de algunas guías que te pueden interesar. No están todas las que son, así que no dudes en preguntarnos para cualquier cosita que quieras saber.

¡Muchas gracias por leer!

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